Ford Fairlane coches clásicos en venta
El Ford Fairlane es sinónimo de la clase americana de los años 50 y 60: una berlina familiar, coupé o cabriolet de grandes dimensiones, detalles cromados y motores potentes. Entre sus variantes más buscadas destacan los modelos con techos retráctiles y versiones 500 Sports Coupe. Un clásico muy valorado por su presencia y versatilidad.
Zoekresultaten

1957 | Ford Fairlane Skyliner
Ford Fairlane Skyliner

1963 | Ford Fairlane 500
Einzigartige Thunderbolt recreation

1954 | Ford Fairlane Victoria
1954 Ford Victoria Crestline V8 '54
Referencias de anuncios de "Ford Fairlane" en Classic Trader
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1959 | Ford Fairlane Skyliner
Cabriolet mit Hardtop und Fernbedienung. Vermutlich auf der Expo Salzburg sofern nicht verkauft.
1962 | Ford Fairlane 500
Fairlane 500 1962 Matching Numbers
1956 | Ford Fairlane Sunliner
Oldtimer
1955 | Ford Fairlane Victoria
Ford USA - Fairline Victoria Crown - 1955
1958 | Ford Fairlane 500 Skyliner
1958 | Ford Fairlane 500 Skyliner
1958 Ford Fairlane 500 Skyliner
1958 | Ford Fairlane 500 Skyliner
1958 Ford Fairlane Retractable Hardtop '58
1966 | Ford Fairlane GT
Ford FAIRLANE S CODE GT 4 SPEED! 390 V8
1957 | Ford Fairlane Club Sedan
1966 | Ford Fairlane GTA
Historia del Ford Fairlane
El Ford Fairlane toma su nombre de la residencia de Henry Ford, 'Fair Lane', y apareció por primera vez en 1955 como el tope de gama de la marca, reemplazando al Crestline. Fue referente del diseño contemporáneo estadounidense, con carrocería disponible en sedán, coupé y convertible, además de la característica panorámica del parabrisas y la pintura bicolor. Desde su debut, el Fairlane combinó modernidad con motor V8 o seis cilindros. Con el paso de los años, el modelo evolucionó, y a finales de los cincuenta su posición como modelo superior pasó al Fairlane 500 y posteriormente al Ford Galaxie. Esto permitió que Fairlane se reposicionara en los 60 como una apuesta intermedia entre el Falcon compacto y el Galaxie grande, cubriendo la naciente demanda de berlinas mid-size estadounidenses. Su historia abarca siete generaciones con numerosos restylings, y alcanzó mercados fuera de EE. UU., como Argentina y Australia, donde la producción se mantuvo hasta 2007.
Evolución de las series y generaciones
Desde su origen en la década de 1950, el Ford Fairlane ha visto siete generaciones. Las primeras series (1955-1956) se ofrecieron en seis versiones destacadas, incluida la innovadora Skyliner con techo panorámico y su característico 'Fairlane stripe'. Tras importantes rediseños en 1957 y la llegada del Fairlane 500 Skyliner descapotable con techo retráctil, la serie mantuvo retoques sucesivos hasta mediados de los 60, cuando la carrocería cambió y se aumentó la cilindrada del motor (hasta 6,4 L en V8). En 1968, recibió otra carrocería y dio paso al Fairlane Torino, quedando la denominación Fairlane solo para versiones base. En Argentina (1969-1981) y Australia (1959-2007), la historia del modelo continuó con especificaciones y estilos propios, incluyendo versiones como la LTD, Standard y 500.
Características destacadas y estadísticas
El Fairlane se distingue por su largo casi de 5 metros, opciones de interior en cuero o tela y numerosos detalles cromados, faros dobles, y línea lateral característica. Destacan la versatilidad en habitáculo (hasta seis plazas), la variedad de motorizaciones —incluidos V8 292cui, 289cui (4,7L), 352cui y, en últimas series australianas, hasta 7L—, y la disponibilidad de versiones como convertible con mecanismos hidráulicos en el techo. Además, es común encontrar unidades con dirección asistida, frenos de doble circuito (en modelos o actualizaciones posteriores) y elementos originales como radios AM y tapizados restaurados. En términos de suministro y demanda dentro del mercado clásico actual, el Ford Fairlane mantiene el 97,9% de la oferta de Ford clásicos de este tipo, y acapara el 99,9% de visitas de interesados en modelos Fairlane, prueba de su relevancia persistente entre coleccionistas y restauradores.
Datos técnicos
Ediciones especiales y modelos de colección
Entre las variantes más singulares del Ford Fairlane destaca el Skyliner (1957-1959), célebre por su techo retráctil completamente accionado eléctricamente —una innovación para la época— y la versión Sunliner convertible. También es relevante el Fairlane 500 Sports Coupe, emblemático por su cuidada estética y mecánica reforzada. En Argentina y Australia se comercializaron ediciones diferenciadas, como la Ford LTD y el lujoso modelo australiano fabricado a nivel nacional a partir de 1967.
Puntos débiles y recomendaciones de mantenimiento
La longevidad del Fairlane depende en gran parte de los cuidados de restauración y su conservación frente a la corrosión, especialmente en las carrocerías expuestas a climas húmedos. Es común encontrar unidades restauradas con documentación que certifica trabajos de chapa, pintura y mantenimiento mecánico. Los sistemas hidráulicos de las versiones Skyliner y Sunliner requieren especial atención debido a la complejidad de sus mecanismos. En modelos más antiguos se debe revisar el estado del sistema eléctrico (especialmente la radio original y mandos), así como la estanqueidad en techos y ventanillas.
Motor, comportamiento y conducción
El comportamiento en carretera del Ford Fairlane varía según generación y motorización. En versiones V8, la respuesta es contundente y permite una conducción relajada en autopista, mientras que las series con motor de seis cilindros priorizan la suavidad y economía de uso. El cambio automático de columna y la dirección asistida, presentes en muchas unidades, aportan comodidad en trayectos urbanos. A partir del rediseño de mediados de los 60, el Fairlane mejoró notablemente las prestaciones gracias a motores de mayor cubicaje y una estructura chasis reforzada. Las variantes Skyliner y Sunliner, además del atractivo visual, entregan una experiencia de conducción particular al descapotar. - Ford Fairlane Skyliner (1957-1959): techo retráctil eléctrico, mecánica V8 potente.
- Ford Fairlane 500 Sports Coupe: deportivas, cromados, habitabilidad.
- Series australianas post 1967: lujo y motores hasta 7 L en V8.
Diseño, interior y equipamiento
El diseño es uno de los grandes atractivos del Fairlane: cromados laterales, colas de alerón en los 50, doble óptica vertical (1966) y versiones con pintura bicolor. El interior puede ser en cuero o tela, con tapizados robustos y molduras originales, volante generoso y salpicadero simétrico. Modelos destacados como el Skyliner incluyen mecanismos de techo eléctrico, mientras que muchas unidades incluyen accesorios como radios AM, originales tapizados y detalles restaurados fieles a fábrica. En Australia, a partir de 1967, el diseño evolucionó hacia una berlina de lujo, con materiales de alta calidad y acabados exclusivos.
Otras particularidades a tener en cuenta
El Ford Fairlane ha tenido presencia en la cultura popular, apareciendo en películas como James Bond (1965, 2002) y juegos de video como Grand Theft Auto bajo el nombre 'Vulture'. El acceso a repuestos y documentación de restauración es habitual y, debido a su popularidad y producción longeva, la localización de componentes originales es relativamente sencilla. El estado de conservación (carrocería libre de óxidos, interiores originales y mecánica al día) influye decisivamente en su valoración en el mercado de clásicos.
Resumen
El Ford Fairlane representa la esencia del automóvil estadounidense clásico, con versiones de alta gama, carrocerías variadas y mecánicas robustas. Su larga historia abarca generaciones, mercados y estilos, adaptándose a las demandas de cada época y región. Como opción para entusiastas de los clásicos, destaca por su presencia, posibilidades de personalización y la amplia disponibilidad de repuestos y accesorios para mantenerlo en perfecto estado.


